Carlos Pampliega Velázquez empresario y dueño del perro de la raza Rottweiler que atacó a un niño de 2 años, desmiente las acusaciones de omisión de auxilio.
El accionista mayoritario del Grupo Universo, Carlos Pampliega, desmintió en un extenso comunicado que tras el incidente con el niño de 2 años y su perro, haya incurrido en omisión de auxilio . Acusó a la abuela del menor por un empujón que le produjo una caída que le ocasionó una lesión en la zona de la cadera, en la que tiene una prótesis.
A continuación puede leer el comunicado.
COMUNICADO A LA OPINIÓN PÚBLICA
Como vecino, padre y abuelo, yo, Carlos Alfonso Pampliega Velázquez, deseo aclarar a la opinión pública el hecho sucedido el pasado 14 de febrero del año en curso, en que un niño de aproximadamente 2 años, fue lastimado por la mascota de mi familia. Primeramente quiero expresar mi profundo dolor ante este accidente, del cual nunca me desentendí.
En este sentido, sobre las publicaciones en redes sociales y medios de prensa, en las que manifiestan que no hubo asistencia por parte mía
ACLARO: QUE no solo lamento el hecho acontecido, sino que desde un principio he ofrecido las reparaciones pertinentes.
QUE no hubo liberación del animal, este se escapó al momento de levantar el portón basculante con el propósito de ingresar al domicilio.
QUE inmediatamente acudí hasta el niño, me interesé y me preocupé por su estado y que al notar una herida a la altura del hombro, ofrecí trasladarlo hasta un centro de atención sanitaria
QUE una de las acompañantes (mayor de edad) del niño manifestó que pediría autorización de la abuela del pequeño para el efecto. En ningún momento hubo omisión de auxilio.
QUE mientras esa persona fue en busca de la abuela, me vi obligado a ingresar a mi casa y bajar el portón con el único objetivo de aislar al animal y evitar que vuelva a salir. Al abrir el portón “peatonal”, fui empujado por la Sra. Graciela Beatriz Modesto, abuela del niño, y caí dentro de la casa. La caída me produjo un golpe afectando las prótesis que tengo en ambas caderas. Por lo cual me vi obligado a llamar a mi abogado para que me represente ante la familia y se ponga a disposición.
QUE a partir de ese momento los familiares del niño no aceptaron ningún tipo de acercamiento propuesto por la familia a instancias del abogado Jorge Cantero, en busca de algún tipo de conciliación.
QUE Luego de varios intentos de acercamiento se logró conversar con el abogado de la familia de nombre Benjamín Pérez y acordaron extraer una muestra de sangre al animal con el fin de descartar cualquier tipo de infecciones u otras afecciones que pusieran en riesgo la salud del niño, que es lo que más nos interesa en este momento. Pidiendo incluso que el abogado Pérez ingrese a mi domicilio junto con el veterinario para constatar la extracción y verificar la libreta de vacunación.
QUE nuestra parte está abierta al diálogo y a la conciliación basándose en la protección de la integridad física y sicológica del niño, para lo cual estamos dispuestos a correr con todos los gastos que eso implica.
Que lamento profundamente lo acontecido y agradezco a las personas que se solidarizaron por este acontecimiento muy desafortunado.
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